Me tocó leerla (ya que gané), frente a ella, pero además, frente a un montón de compañeros de trabajo, que confieso, me llenaron la cara de sangre, es decir, me sonrojaron a más no poder.
En todo caso, les pongo aquí la susodicha carta:
“La radio puede cambiar vidas”…
esas siempre fueron palabras que me resultaban vacías, porque una
radio no es más que un aparato en donde se escuchan a personas a
quienes se les paga por brindar entrenamiento…
1997 fue un año lleno de
contradicciones, sobre todo si se toma en cuenta que yo llevaba ya 4
años viviendo solo y que había pasado por toda una serie de
trabajos pesados y mal pagados, en los que me desgastaba cada vez más
y me alcanzaba cada vez menos.
Milagrosamente, mi padre, siempre el
gran ayudador, me convenció de entrevistarme con el director de
programación de una radio comunitaria, que luego de cruzar unas
cuantas palabras, me dijo: “comenzás el lunes”
Logré hacerme pronto de grandes
amigos y aprender los detalles que convierten el oficio en una de las
carreras más divertidas del mundo y puedo decir que es uno de los
trabajos que más he disfrutado en mi vida… pero no solo eso.
Estando en turno, mientras
programaba alguna de esas canciones gruperas de moda (de aquel
tiempo, claro está), vi que se comenzaban a reunir fuera de la
cabina de la radio algunos de mis amigos, uno de ellos, el más
gordito, me impedía la visión de la persona que se encontraba
detrás de él, lo cual tampoco me quitaba el sueño, pero me daba
curiosidad. Sin embargo, en un determinado momento, se movió y dejó
a la vista a alguien. Jamás, en mi vida, había yo visto a una mujer
de tanta belleza, pero había algo más, algo que, hasta este
momento, no logro definir con exactitud.
Creo que todos notaron la cara de
idiota que debí tener en ese momento, pues llevaron a dicha mujer a
la cabina para presentármela: era una nueva integrante de la radio,
cuyo nombre no se me olvidaría de ese momento y hasta que el último
aliento de vida abandone mi cuerpo: EVA.
“Fue amor a primera vista”, es
otra de esas frases que siempre me sonaron tontas… hasta ese día.
Desde que vi a Eva, yo sabía que era la persona con la que quería
pasar el resto de mis días y más, si es que eso es posible.
Graciosamente, sigo pensando que ella merece a alguien mejor, pero
agradezco que no lo encuentre. Eva ha sido, es y será el alma gemela
que no todos tienen la suerte de encontrar. YO SÍ TUVE ESA SUERTE.
Y es gracioso como la vida cambia la
perspectiva de las cosas, antes, las frases “la radio puede cambiar
vidas” y “fue amor a primera vista” me resultaban tontas,
clichés que no deberían existir. Ahora puedo asegurar que una radio
cambió mi vida y la convirtió en la vida más feliz del universo y
que el amor a primera vista existe, sobre todo, si uno tiene la dicha
de ver a personas como Eva, que por cierto, ha compartido mis días y
mis noches, mis tristezas y mis alegrías, mis buenos y mis malos
ratos, desde hace ya 18 años.
“Nadie sabe lo que tiene hasta que
lo pierde”, es una frase que, con seguridad, no aplica en mi caso.
Sé lo que tengo, sé el tesoro incalculable, irremplazable y hermoso
que tengo en mi vida y no pienso esperar a perderla para saber
apreciarlo, sobre todo, porque NO PIENSO PERDERLA.
FIN
4 comentarios:
Buenísimo master!!!
Siempre lo he dicho, sos la mera mata!
Siempre lo he dicho, sos la mera mata!
+Daniel Gutierrez : Gracias my friend!!
+Daysi Lozano : Gracias chelusca, y jaja
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