Bueno, siendo que la niña C... Virginia me ha invitado a este "volado", pues... fue hace mucho, mucho tiempo, en una galaxia muy, muy lejana.
Tenía yo 15 años y me contrataron como digitador voluntario en una ONG que se llamaba CEDRO, me pagaban 200 colones mensuales por digitar proyectos, darles formato, meter imágenes, etc. Trabajaba en WordPerfect 5.1 (aún pienso que fue uno de los mejores procesadores de texto que han existido). Fue mi primer trabajo y en realidad me fascinaba escuchar el golpeteo del teclado (tanto es así que el teclado de mi computadora actual es un IBM más viejo que "dame cuís" como dice mi abuelita. Recuerdo que con el primer pago me compré mi primer walkman (que por cierto no era Sony, sino que Sankey) y fui tan feliz que no dormí dos noches seguidas por estar escuchando música en mi cuarto. En aquellos días se escuchaba la femenina (que ni sé si todavía existe), Mi Preferida, Radio Láser y la ABC era la estación oficial de las versiones. Después invité a comer a mis papás y recuerdo que me sentí tan contento de pagar yo, que aún ahora, cuando invito a mi padre, me siento como aquel día.
Bien, creo que no hay más que decir al respecto, me gustaría invitar a don Carlos Ábrego, Beka y Armando Díaz.
sábado, 27 de octubre de 2007
miércoles, 24 de octubre de 2007
Estoy feliz, feliz, feliz... miren lo que tengo
1 hora 20 minutos (aproximadamente) de felicidad total cortesía de Quino. NO ES FABULOSO!!!!!!!!!
lunes, 22 de octubre de 2007
Vaya!!!! qué tal esto?
martes, 16 de octubre de 2007
ESTO DAMAS Y CABALLEROS... ES UN ORGASMO MENTAL
Lucia Micarelli con el maestro Jethro Tull interpretando Kashmir de los enormes Led Zepelin
, no hay nada más que se pueda desearlunes, 15 de octubre de 2007
Action Blog day
La erosión no es otra cosa que la sustracción de roca al suelo intacto. Esto se debe la mayoría de veces a la acción del agua o del viento.
Si bien la erosión es un proceso natural en cualquier tipo de suelo, lo cierto es que, cuando esta acción se ve acelerada por la mano del hombre, puede llevar a verdaderas catástrofes.
En nuestro país suele dársele prioridad grado -1 a las cuestiones del medio ambiente, siendo el caso que los intereses personales (o de grupos reducidos de personas) pueden mucho más que le interés del resto de personas. Las erosiones en los terrenos que otrora eran grandes extensiones forestadas, han ido convirtiéndose poco a poco en enormes urbanizaciones en lo que menos se puede encontrar son preventivos contra la erosión.
Las personas en general suelen prestar poca o ninguna atención al proceso de erosión de los suelos a su alrededor, y suelen darse cuenta hasta que ya es demasiado tarde. Si bien es cierto no es posible detener la erosión, la mano del humano es un verdadero acelerador de este proceso. Cuando es precisamente el hombre y sus empresas los que se dedican a acabar lentamente con los árboles, que son precisamente los que contribuyen a que la erosión se haga de forma lenta (en realidad la palabra en este caso debería ser "natural")
Cuando un sólo árbol es removido del lugar en el que ha estado por mucho tiempo, ese espacio puede convertirse, por efecto de las lluvias en una zanja enorme que, con el tiempo, provoque enormes deslaves que pueden llevar a desastres como el que se dio hace muchos años en la colonia Montebello.
El ejemplo anterior no es más que un ejemplo de tipo exagerado (casi patético si lo desean), pero es sólo un ejemplo que, a gran escala, puede convertirse en un problema grave.
La conciencia del problema de la erosión debe ser compartida, no sólo por las empresas, sino también por todo el mundo, siendo el caso que una gran parte de la responsabilidad de este mundo deforestado, erosionado y contaminado, recae precisamente en las personas que no son propietarias de empresas o responsables de generar desechos contaminantes en grandes cantidades. Lo anterior se debe, precisamente, al hecho de que solemos pensar que un sólo árbol cortado no hace una gran diferencia, que una sola bolsa tirada no conlleva a la creación de un basurero, que un solo parlante a todo volumen no creará una enorme contaminación acústica, etc, etc.
En este día del Action Blog, he querido recordar un tema que ya había tratado antes, pero del que he sido testigo una y otra vez a lo largo de muchos años.
Dulces sueños y profunda conciencia.
Alberto Enrique Chávez Guatemala
Si bien la erosión es un proceso natural en cualquier tipo de suelo, lo cierto es que, cuando esta acción se ve acelerada por la mano del hombre, puede llevar a verdaderas catástrofes.
En nuestro país suele dársele prioridad grado -1 a las cuestiones del medio ambiente, siendo el caso que los intereses personales (o de grupos reducidos de personas) pueden mucho más que le interés del resto de personas. Las erosiones en los terrenos que otrora eran grandes extensiones forestadas, han ido convirtiéndose poco a poco en enormes urbanizaciones en lo que menos se puede encontrar son preventivos contra la erosión.
Las personas en general suelen prestar poca o ninguna atención al proceso de erosión de los suelos a su alrededor, y suelen darse cuenta hasta que ya es demasiado tarde. Si bien es cierto no es posible detener la erosión, la mano del humano es un verdadero acelerador de este proceso. Cuando es precisamente el hombre y sus empresas los que se dedican a acabar lentamente con los árboles, que son precisamente los que contribuyen a que la erosión se haga de forma lenta (en realidad la palabra en este caso debería ser "natural")
Cuando un sólo árbol es removido del lugar en el que ha estado por mucho tiempo, ese espacio puede convertirse, por efecto de las lluvias en una zanja enorme que, con el tiempo, provoque enormes deslaves que pueden llevar a desastres como el que se dio hace muchos años en la colonia Montebello.
El ejemplo anterior no es más que un ejemplo de tipo exagerado (casi patético si lo desean), pero es sólo un ejemplo que, a gran escala, puede convertirse en un problema grave.
La conciencia del problema de la erosión debe ser compartida, no sólo por las empresas, sino también por todo el mundo, siendo el caso que una gran parte de la responsabilidad de este mundo deforestado, erosionado y contaminado, recae precisamente en las personas que no son propietarias de empresas o responsables de generar desechos contaminantes en grandes cantidades. Lo anterior se debe, precisamente, al hecho de que solemos pensar que un sólo árbol cortado no hace una gran diferencia, que una sola bolsa tirada no conlleva a la creación de un basurero, que un solo parlante a todo volumen no creará una enorme contaminación acústica, etc, etc.
En este día del Action Blog, he querido recordar un tema que ya había tratado antes, pero del que he sido testigo una y otra vez a lo largo de muchos años.
Dulces sueños y profunda conciencia.
Alberto Enrique Chávez Guatemala
viernes, 12 de octubre de 2007
Si fuese posible reencarnar
Si fuese posible, me gustaría reencarnar en canción de amor,
para morir como el recuerdo del desamor o para renacer como el fénix de cada enamorado
Si fuese posible, me gustaría reencarnar en caricatura,
para hacer sonreir en la infancia, y provocar nostalgias... cuando los calendarios empiezan a olvidarnos
Si fuese posible reencarnar, me gustaría ser inspiración,
para ser sonrisa en el alma, para ser suspiro en las manos... para ser vida en los sentidos.
Si fuese posible reencarnar, me gustaría ser sueño,
para volver y volver, con ansia o con tedio... pero volver
Si yo llegase a reencarnar, me gustaría hacerlo como lluvia suave,
para lavar las penas, para limpiar las almas, para propiciar los besos que calientan el cuerpo
Si se pudiera reencarnar, me gustaría ser viento, rocío, árbol, serpiente,...
pero definitivamente... no quisiera jamás, volver a ser humano
Alberto Enrique Chávez Guatemala
para morir como el recuerdo del desamor o para renacer como el fénix de cada enamorado
Si fuese posible, me gustaría reencarnar en caricatura,
para hacer sonreir en la infancia, y provocar nostalgias... cuando los calendarios empiezan a olvidarnos
Si fuese posible reencarnar, me gustaría ser inspiración,
para ser sonrisa en el alma, para ser suspiro en las manos... para ser vida en los sentidos.
Si fuese posible reencarnar, me gustaría ser sueño,
para volver y volver, con ansia o con tedio... pero volver
Si yo llegase a reencarnar, me gustaría hacerlo como lluvia suave,
para lavar las penas, para limpiar las almas, para propiciar los besos que calientan el cuerpo
Si se pudiera reencarnar, me gustaría ser viento, rocío, árbol, serpiente,...
pero definitivamente... no quisiera jamás, volver a ser humano
Alberto Enrique Chávez Guatemala
domingo, 7 de octubre de 2007
Linux, ¿Qué es eso?
El día domingo estaba en el trabajo y uno de los compañeros se quejaba de la gran cantidad de virus que su computadora ha logrado almacenar en tan poco tiempo (lleva sólo dos meses de tener la computadora, que por cierto venía con el sistema operativo Windows XP preinstalado), claro, razón tiene la pobre computadora, siendo que pasa visitando sitios porno por sobre cualquier otra cosa (y que conste que no estoy diciendo que me disguste la pornografía).
En todo caso, estábamos hablando con otro compañero, y entre los dos le dijimos que debía cambiarse a Linux, para evitar la infección de virus que tanto atacan al sistema operativo de la Micro$oft. Debo admitir que la pregunta que nos espetó no me resultó del todo sorprendente: ¿Y qué es Linux?
Intentamos junto al buen amigo José (el otro compañero con el que estábamos hablando) hacerle ver las ventajas de Linux y le explicamos que era un sistema operativo, etc, etc, etc, a lo que él quedó casi que con la misma cara de signo de interrogación que con la que abrimos la plática.
Después de todo, terminó diciéndonos, “pero voy a quedarme sin Windows, ¿entonces cómo voy a ocupar mi computadora?”
Si bien esa pregunta tampoco me sorprendió del todo, debo admitir que me puso a pensar en una posibilidad aterradora. ¿Y si el partido en el gobierno tuviese una máquina de marketing tan poderosa como la de M$, que ha logrado hacer creer a tantas personas que Windows es la única opción como sistema operativo?... más aún, ¿que ha contribuido a hacer que tantas personas se conformen con saber que la computadora arranca porque tiene que arrancar sin importar ni siquiera un concepto tan elemental como el de sistema operativo?
Si nos ponemos a pensar, Windows es un reflejo muy característico de nuestra sociedad o de nuestro modo de producción, las cosas funcionan porque deben de funcionar, no me molesten con detalles, mi vida es ocupada, estresada y llena de cosas mucho más importantes que aprender. Aplicando el ejemplo, voten por el mismo partido, no hay otra opción, ellos les hacen la vida más cómoda, o al menos son lo suficientemente inteligentes para hacerles creer que así es, no existe otro producto en el mercado mejor que ARENA y no existen más posibilidades que su camino, sus ideas, sus principios y su forma de ver a todos los demás que no forman parte de ellos.
Es increíble la forma en la que Micro$oft le ha hecho creer a tantas personas que sólo con el poder del dinero (¿no les suena familiar?) las cosas funcionan como deben de funcionar y que las ideas de una sociedad en la que la riqueza no esté distribuida de forma tan desigual es totalmente imposible por razones históricas, filosóficas, de naturaleza humana, porque Dios no lo quiere de esa forma, etc. Entonces nuestras almas estarían uniformadas, nuestro cerebro estaría lleno de imágenes repetidas de un futuro que fue igual al pasado y nada diferente al presente y en definitiva la idea de un software de código abierto en el que no se cobra por su utilización y el que promueve el conocimiento como arma para vencer las injusticias, es entonces una tontería que no vale la pena seguir alimentando.
Si el mundo fuese como Micro$oft nos ha hecho creer, yo no tendría cabida en él,... y tampoco lo desearía.
Alberto Enrique Chávez Guatemala
En todo caso, estábamos hablando con otro compañero, y entre los dos le dijimos que debía cambiarse a Linux, para evitar la infección de virus que tanto atacan al sistema operativo de la Micro$oft. Debo admitir que la pregunta que nos espetó no me resultó del todo sorprendente: ¿Y qué es Linux?
Intentamos junto al buen amigo José (el otro compañero con el que estábamos hablando) hacerle ver las ventajas de Linux y le explicamos que era un sistema operativo, etc, etc, etc, a lo que él quedó casi que con la misma cara de signo de interrogación que con la que abrimos la plática.
Después de todo, terminó diciéndonos, “pero voy a quedarme sin Windows, ¿entonces cómo voy a ocupar mi computadora?”
Si bien esa pregunta tampoco me sorprendió del todo, debo admitir que me puso a pensar en una posibilidad aterradora. ¿Y si el partido en el gobierno tuviese una máquina de marketing tan poderosa como la de M$, que ha logrado hacer creer a tantas personas que Windows es la única opción como sistema operativo?... más aún, ¿que ha contribuido a hacer que tantas personas se conformen con saber que la computadora arranca porque tiene que arrancar sin importar ni siquiera un concepto tan elemental como el de sistema operativo?
Si nos ponemos a pensar, Windows es un reflejo muy característico de nuestra sociedad o de nuestro modo de producción, las cosas funcionan porque deben de funcionar, no me molesten con detalles, mi vida es ocupada, estresada y llena de cosas mucho más importantes que aprender. Aplicando el ejemplo, voten por el mismo partido, no hay otra opción, ellos les hacen la vida más cómoda, o al menos son lo suficientemente inteligentes para hacerles creer que así es, no existe otro producto en el mercado mejor que ARENA y no existen más posibilidades que su camino, sus ideas, sus principios y su forma de ver a todos los demás que no forman parte de ellos.
Es increíble la forma en la que Micro$oft le ha hecho creer a tantas personas que sólo con el poder del dinero (¿no les suena familiar?) las cosas funcionan como deben de funcionar y que las ideas de una sociedad en la que la riqueza no esté distribuida de forma tan desigual es totalmente imposible por razones históricas, filosóficas, de naturaleza humana, porque Dios no lo quiere de esa forma, etc. Entonces nuestras almas estarían uniformadas, nuestro cerebro estaría lleno de imágenes repetidas de un futuro que fue igual al pasado y nada diferente al presente y en definitiva la idea de un software de código abierto en el que no se cobra por su utilización y el que promueve el conocimiento como arma para vencer las injusticias, es entonces una tontería que no vale la pena seguir alimentando.
Si el mundo fuese como Micro$oft nos ha hecho creer, yo no tendría cabida en él,... y tampoco lo desearía.
Alberto Enrique Chávez Guatemala
viernes, 5 de octubre de 2007
Con nosotros... toda la vida
Es 1994, voy en un carro, son casi las 11:00 de la noche, traigo una herida en un costado, el automóvil que me lleva al hospital va olvidándose cada vez más de la prudencia y mi adusto corazón sólo puede pensar que ese día, en la mañana, aquella mujer me había dicho ya no más, el dolor no quiere ceder, pero mi cerebro repite una, otra y otra y otra vez, la canción que me ha acompañado siempre, en todo momento, en cualquier circunstancia:
La voz de Miguel Ríos y las letras de Joaquín Sabina no podían crear otra cosa que un monstruo de canción. Tanto así, como para pensar en ella en los momentos menos apropiados. Sólo espero que amás de alguno de los que lee esta locura, también le cause los mismos calosfríos que me produce esta canción. Dulces sueños.
Alberto Enrique Chávez Guatemala
La voz de Miguel Ríos y las letras de Joaquín Sabina no podían crear otra cosa que un monstruo de canción. Tanto así, como para pensar en ella en los momentos menos apropiados. Sólo espero que amás de alguno de los que lee esta locura, también le cause los mismos calosfríos que me produce esta canción. Dulces sueños.
Alberto Enrique Chávez Guatemala
jueves, 4 de octubre de 2007
Recuerdos Despintados
Recuerdos Despintados.
Hace algunos días, sin yo quererlo, debo decirlo, me ví en la reunión de la promoción 1992 del colegio (carajo, sí que estoy viejo).
Jamás había estado en una de esas reuniones, y debo admitir que espero jamás volver a estarlo. No soy del tipo sociable y lleno de deseos de ver a los fantasmas del pasado.
Lo cierto es que vi mucha gente que tenía años de no ver, incluyendo enemigos, “panitas”, viejos amores, viejas amantes, fracasados, triunfadores, renegados, miembros de uno y otro y otro partido político que decidieron hacer la guerra en el momento en que cada uno sacó sus preferencias, coroneles (esta es la razón más grande para no volver a llegar a esas reuniones), ex combatientes (aunque parezca mentira), casadas, divorciadas, solteras, casados, divorciados, solteros... Mucha, mucha gente, con la cual ya no tenemos más en común que el simple hecho de habernos graduado del mismo lugar.
Quiero aclarar que no estoy demeritando las reuniones de las promociones, sino, más bien, estoy aclarando que siempre he sido y siempre seré un tipo raro, al que no le gusta la compañía de los seres humanos (por eso digo siempre que Eva, es una extraterrestre).
En fin, logramos hacer un grupito dentro de todo el murmullo de personas y dicho grupo estaba conformado por: Castaneda (el Ingeniero Castaneda, según nos hizo notar), el Pato, mismo que, de hecho no se graduó del colegio pero siempre añoró los tiempos de éste, el Peche, que por cierto se hizo Militar, Alicia (ay!, los viejos amores), ahora convertida en odontóloga, Simón, ahora todo un licenciado en Inglés, Ivis, una doctora (muy hermosa, además) y un servidor.
Conforme el tiempo pasaba y los recuerdos salían cada vez más a cuenta, la primera en desmoronarse fue Ivis, quien empezó a llorar como Magdalena y nos contó que su esposo la maltrataba (cosa rara tanta confidencia, si ninguno de nosotros, excepto el Peche había tomado un solo trago). De alguna forma intentamos consolar a la pobre Ivis y le dijimos que lo mejor, en definitiva, era separarse y plantarle reverenda demanda por maltrato. Ella calló, nos miró y al mejor estilo de las novelas, nos dijo... “pero es que yo lo quiero” Frase que a todos los hombres (lógico, somos más tontos en esos temas), nos dejó callados. Sólo Alicia, con algunas lágrimas en los ojos, le dijo que no fuera babosa y que lo más lógico era plantarle la demanda, si ya ella (Ivis) había tratado de hablar con el fulano y había resultado peor.
Como pudimos, logramos salir del engorroso tema (sí, como cualquier ser humano, buscamos la huída, en lugar de enfrentar el problema, Ivis incluída, claro está) e Ivis dijo que iba a pensar seriamente lo de la demanda. Por supuesto todos estamos seguros de que Ivis, con toda claridad, no estaba dipuesta a pensarlo siquiera.
Alicia fue la segunda en sincerarse y, para mi sorpresa, me espetó en mi cara mi falta de valor, ya que jamás me le había declarado y por aquella razón ella tuvo que aceptar a otro fulano que, al igual que a Ivis, la hizo sufrir. Al principio me resultó gracioso, pero después me di cuenta de que Alicia estaba hablando con toda la sinceridad del mundo. No supe que decir, sobre todo porque lo de la falta de valor era total y absolutamente cierto: Alicia fue mi amor platónico durante todo mi segundo ciclo y bachillerato, pero jamás le dije nada, tal vez por temor que se estropeara lo que teníamos como amigos, tal vez por el simple hecho de que me faltaron “agallas”. Como sea, el Pato me salvó la vida diciendo que en todo caso, no había porque culparme si en realidad quien aceptó al otro fulano (cuyo nombre, por cierto es igualito que el cazador de Bugs Bunny: Elmer) y de forma apresurada, fue ella.
Pero la cosa fue todavía peor, pues ella empezó a decir que ella siempre había sabido que yo me moría por ella y que por consiguiente yo sí tenía responsabilidad porque lo único que tenía que haber hecho yo era preguntarle si quería ser su novia. En realidad me sentí tremendamente incómodo... y ridículo por aquella situación.
Sin embargo, no pude evitar hacer lo que siempre tiendo a hacer: analizar a las personas. Y me di cuenta de que, pese a que Ivis es una doctora en medicina con relativos buenos ingresos, y que Alicia es una Odontóloga que además de extirpar muelas, extirpa también buenos dólares por ello, ambas eran una muestra clara de nuestra sociedad, en la que nos esforzamos tanto por sacar una carrera, al grado de descuidar de forma casi total nuestra vida personal, olvidándonos de nuestras necesidades y pensando sólo en un futuro que estamos seguros (aunque no sea así) que llegará, y que todos los sacrificios cometidos hoy, serán recompensados en algún momento mañana, lo cual, es un craso error, sobre todo si tomamos en cuenta de que la única forma de construir un futuro, es haciendo las cosas desde hoy, como debería ser, o al menos, como quisiésemos que fueran.
En el afán de no quedarse en soledad, dos grandes mujeres ahora sufren maltrato, en el afán de ser triunfadoras en su vida profesional, hay dos grandes mujeres que no pueden mirar a nadie de frente porque se avergüenzan de lo que son en sus vidas personales.
La vida es graciosa y cruel, y no es igual para nadie, todos tenemos fantasmas, presentes o pasados, y todos parecen arrepentirse de algo, siempre lo he dicho, la humanidad no debería existir... pero existimos.
CONTINUARÁ...
Hace algunos días, sin yo quererlo, debo decirlo, me ví en la reunión de la promoción 1992 del colegio (carajo, sí que estoy viejo).
Jamás había estado en una de esas reuniones, y debo admitir que espero jamás volver a estarlo. No soy del tipo sociable y lleno de deseos de ver a los fantasmas del pasado.
Lo cierto es que vi mucha gente que tenía años de no ver, incluyendo enemigos, “panitas”, viejos amores, viejas amantes, fracasados, triunfadores, renegados, miembros de uno y otro y otro partido político que decidieron hacer la guerra en el momento en que cada uno sacó sus preferencias, coroneles (esta es la razón más grande para no volver a llegar a esas reuniones), ex combatientes (aunque parezca mentira), casadas, divorciadas, solteras, casados, divorciados, solteros... Mucha, mucha gente, con la cual ya no tenemos más en común que el simple hecho de habernos graduado del mismo lugar.
Quiero aclarar que no estoy demeritando las reuniones de las promociones, sino, más bien, estoy aclarando que siempre he sido y siempre seré un tipo raro, al que no le gusta la compañía de los seres humanos (por eso digo siempre que Eva, es una extraterrestre).
En fin, logramos hacer un grupito dentro de todo el murmullo de personas y dicho grupo estaba conformado por: Castaneda (el Ingeniero Castaneda, según nos hizo notar), el Pato, mismo que, de hecho no se graduó del colegio pero siempre añoró los tiempos de éste, el Peche, que por cierto se hizo Militar, Alicia (ay!, los viejos amores), ahora convertida en odontóloga, Simón, ahora todo un licenciado en Inglés, Ivis, una doctora (muy hermosa, además) y un servidor.
Conforme el tiempo pasaba y los recuerdos salían cada vez más a cuenta, la primera en desmoronarse fue Ivis, quien empezó a llorar como Magdalena y nos contó que su esposo la maltrataba (cosa rara tanta confidencia, si ninguno de nosotros, excepto el Peche había tomado un solo trago). De alguna forma intentamos consolar a la pobre Ivis y le dijimos que lo mejor, en definitiva, era separarse y plantarle reverenda demanda por maltrato. Ella calló, nos miró y al mejor estilo de las novelas, nos dijo... “pero es que yo lo quiero” Frase que a todos los hombres (lógico, somos más tontos en esos temas), nos dejó callados. Sólo Alicia, con algunas lágrimas en los ojos, le dijo que no fuera babosa y que lo más lógico era plantarle la demanda, si ya ella (Ivis) había tratado de hablar con el fulano y había resultado peor.
Como pudimos, logramos salir del engorroso tema (sí, como cualquier ser humano, buscamos la huída, en lugar de enfrentar el problema, Ivis incluída, claro está) e Ivis dijo que iba a pensar seriamente lo de la demanda. Por supuesto todos estamos seguros de que Ivis, con toda claridad, no estaba dipuesta a pensarlo siquiera.
Alicia fue la segunda en sincerarse y, para mi sorpresa, me espetó en mi cara mi falta de valor, ya que jamás me le había declarado y por aquella razón ella tuvo que aceptar a otro fulano que, al igual que a Ivis, la hizo sufrir. Al principio me resultó gracioso, pero después me di cuenta de que Alicia estaba hablando con toda la sinceridad del mundo. No supe que decir, sobre todo porque lo de la falta de valor era total y absolutamente cierto: Alicia fue mi amor platónico durante todo mi segundo ciclo y bachillerato, pero jamás le dije nada, tal vez por temor que se estropeara lo que teníamos como amigos, tal vez por el simple hecho de que me faltaron “agallas”. Como sea, el Pato me salvó la vida diciendo que en todo caso, no había porque culparme si en realidad quien aceptó al otro fulano (cuyo nombre, por cierto es igualito que el cazador de Bugs Bunny: Elmer) y de forma apresurada, fue ella.
Pero la cosa fue todavía peor, pues ella empezó a decir que ella siempre había sabido que yo me moría por ella y que por consiguiente yo sí tenía responsabilidad porque lo único que tenía que haber hecho yo era preguntarle si quería ser su novia. En realidad me sentí tremendamente incómodo... y ridículo por aquella situación.
Sin embargo, no pude evitar hacer lo que siempre tiendo a hacer: analizar a las personas. Y me di cuenta de que, pese a que Ivis es una doctora en medicina con relativos buenos ingresos, y que Alicia es una Odontóloga que además de extirpar muelas, extirpa también buenos dólares por ello, ambas eran una muestra clara de nuestra sociedad, en la que nos esforzamos tanto por sacar una carrera, al grado de descuidar de forma casi total nuestra vida personal, olvidándonos de nuestras necesidades y pensando sólo en un futuro que estamos seguros (aunque no sea así) que llegará, y que todos los sacrificios cometidos hoy, serán recompensados en algún momento mañana, lo cual, es un craso error, sobre todo si tomamos en cuenta de que la única forma de construir un futuro, es haciendo las cosas desde hoy, como debería ser, o al menos, como quisiésemos que fueran.
En el afán de no quedarse en soledad, dos grandes mujeres ahora sufren maltrato, en el afán de ser triunfadoras en su vida profesional, hay dos grandes mujeres que no pueden mirar a nadie de frente porque se avergüenzan de lo que son en sus vidas personales.
La vida es graciosa y cruel, y no es igual para nadie, todos tenemos fantasmas, presentes o pasados, y todos parecen arrepentirse de algo, siempre lo he dicho, la humanidad no debería existir... pero existimos.
CONTINUARÁ...
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