A mayor necesidad de dinero, menor probabilidad de obtenerlo.
A mayor religiosidad (sectaria, claro está), mayor cantidad de hijos que Dios mande.
A más chuchos, más pulgas.
A más panes, menos queso.
Más balas, menos neuronas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario