Entrada la noche, el hombre Jack entra en la casa de la familia y asesina a todos... menos a uno: el hijo menor que recién aprende a caminar, quien sin querer se escapa al cementerio y es acogido por los muertos del lugar, quienes le dan la ciudadanía honorífica y a quien le asignan un particular tutor: Silas, que no es miembro del cementerio, pero que tampoco está vivo, y sin embargo puede ir y venir dentro y fuera del cementerio, a diferencia de los demás habitantes del lugar.
Nadie Owens, nombre que recibe el niño, crece y va conociendo muchos secretos que entrañan tanto el cementerio como sus habitantes, así como otros seres fantásticos como los ghouls, una niña bruja, un habitante de nombre Sanguinario, antiquísimo ser que custodia un tesoro esperando a su amo.
Jack, el hombre que buscaba matar a toda la familia de Nadie, sigue buscándolo y la parte final del libro se basa en la historia de Nadie tratando de sobrevivir a Jack y a todo el gremio de los Jacks, ayudado por Silas, que es en realidad un miembro de la guardia de honor, que además no está ni muerto ni vivo y, dato curioso, no se refleja en los espejos :)
Soy fan confeso de Gaiman y este libro (literatura juvenil) no hace más que confirmar las razones que tengo para admirar a este escritor de origen inglés de quien siempre que encuentro un libro el impulso de coleccionista me lleva a comprarlo.
Como siempre con Gaiman, mi recomendación para este libro es LÉANLO y salgan un poco del mundo real, para entrar en el de la fantasía de Gaiman.
Saludos a todos!!
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